Si vas a viajar a Uzbekistán entonces necesitas saber qué ver en Bujará.
La ciudad más sagrada de Asia Central puede presumir de tener un casco antiguo en el que el tiempo parece detenerse entre madrazas, caravasares y mezquitas. Por eso te invitamos a que no te pierdas nuestro recorrido por Bukhara, en el corazón de la Ruta de la Seda.
Vienes con nosotros?
Tabla de contenidos
Bujará a lo largo de la historia
Antes de contarte qué ver en Bujará conozcamos un poco la historia de la ciudad.
Considerada una de las ciudades santas del Islam en Asia Central, Bujará tuvo su época de esplendor durante el llamado Imperio Samánida (siglos IX-X) cuando llegó a ser incluso capital del reino y uno de los centros culturales más avanzados del mundo.
Más tarde, con la llegada de los Shaybánidas en el siglo XVI, Bujará vivió su segundo momento de gloria y la ciudad se llenó de bazares, caravasares, mezquitas y madrazas, siendo proclamada además la capital del Janato de Bujará.
Con la independencia del Janato (más tarde sería Emirato de Bujará) y la llegada de los rusos la ciudad pasó a formar parte del Imperio Ruso primero y luego a la antigua URSS, hasta su disolución.
En la actualidad Bujará es una de las ciudades más visitadas del país gracias a un casco antiguo cargado de historia.
Qué ver en Bujará
Lo bueno de Bujará es que a diferencia de Samarcanda aquí sí existe un casco histórico bien definido, algo que permite organizarse y visitar los lugares de interés sin hacer grandes desplazamientos.
Por otro lado, para ver bien Bujará y disfrutar de ella es indispensable reservar al menos dos días completos en la ciudad. Solo así es posible ver en condiciones todo lo que ofrece la bella Bukhara.
A continuación te contamos cuáles son los lugares imprescindibles que ver en Bujará.
Plaza Lyabi Hauz
Esta plaza es uno de nuestros lugares preferidos de Bujará. Y es que en ella se respira vida y cotidianeidad, algo que no nos puede gustar más.
Construida en el año 1620 en torno a un estanque de agua, la Plaza Lyabi Hauz es además el corazón del casco histórico de Bukahra.
Repleta de varios restaurantes, bares y cafeterías, en esta plaza hay tres monumentos de interés, la Madraza Nadir Divanbegi, la Madraza Kukeldash y la Khanaka Nadir Divangegi, ésta última reconvertida en un pequeño museo.
Madraza Nadir Divanbegi
En un primer momento el edificio se construyó para que funcionara como caravasar pero en el año 1622 acabó convirtiéndose en una madraza después de la visita del kan del momento.
La fachada exterior de la Madraza Nadir Divanbegi destaca por su magnífica decoración hecha con azulejos de colores. Pero también por los dos pavos reales de la parte superior, algo que va contra las normas del Islam donde las representaciones de seres vivos están prohibidas.
Ya en el interior de la madraza nos encontramos con un patio repleto de puestos de artesanía, souvenirs, alfombras, ropa típica uzbeka…
La Madraza Nadir Divanbegi abre todos los días de 8 a 18 h.
Justo en frente de la Madraza Nadir Divan-Begi hay una estatua de Hoja Nasruddin. un personaje mítico de la tradición sufí y uno de los lugares preferidos de los uzbekos para hacerse fotos en familia.
Madraza Kukeldash
La Madraza Kukeldash se construyó en el año 1569 y al parecer en su momento fue la madraza más grande de toda Asia Central.
Sin embargo, en la actualidad ya no funciona como tal. De hecho en su interior nos encontramos los omnipresentes puestos de artesanía, algo habitual en casi todas las madrazas de Uzbekistán.
Aún así merece la pena entrar y fijarse en los detalles de su construcción.
Khanaka Nadir Divangegi
El tercer monumento de interés de la Plaza Lyabi Hauz es la Khanaka Nadir Divangegi.
Situada justo en frente del estanque de agua de dicha plaza, este edificio fue construido en el año 1620 para dar cobijo y alojamiento a los sufíes que viajaban a través de la Ruta de la Seda.
En el interior de la Khanaka hay una pequeña exposición de cerámica y aunque solo sea para ver los detalles decorativos de las cúpulas ya merece la pena entrar y echar un vistazo.
Además el ticket solo cuesta 3.000 soms (0,27 € – junio 2022).
Chor Minor
Se trata de uno de los símbolos de Bujará así que no puedes perdértelo en tu visita a la ciudad.
La Madraza Chor Minor (cuatro minaretes) o mejor dicho lo que queda de ella se construyó en el año 1807 gracias a Niyazkul Bey, un rico comerciante afincado en Bujará.
Tras un viaje a la India y después de ver el Taj Mahal, Niyazkul decidió reunir a los mejores arquitectos de la época para construir una madraza que cumpliera dos condiciones. Por un lado, el edificio formaría parte de la Ruta de la Seda y por otro la madraza tendría que reflejar que todas las culturas, pueblos y religiones son iguales.
El resultado de estos propósitos fue la Madraza Chor Minor.
Sin embargo, en la actualidad no podemos disfrutar de todo el conjunto de Chor Minor, ya que el paso del tiempo ha hecho sus estragos y la madraza no ha llegado hasta nuestros días.
Aún así se conservan la puerta de entrada a la misma y los esbeltos y azulados minaretes.
La entrada a Chor Minor es gratuita pero para subir al tejado hay que pagar un pequeño ticket de 4.000 soms (0,36 € – junio 2022).
Bazares de Bujará
Antes de la época soviética del país, la ciudad de Bujará estaba repleta de bazares y mercados. Todos ellos estaban dispuestos en torno a la Plaza Lyabi Hauz y se extendían también al norte y oeste de la misma.
Poco queda ya de estos antiguos bazares pero gracias a las reconstrucciones financiadas por los rusos hoy en día podemos disfrutar de al menos tres de ellos.
Toqi Sarrofon Bazar
Situado a pocos metros de la Khanaka Nadir Divangegi este pequeño bazar era el lugar donde se encontraban las oficinas de cambio de moneda de Bujará.
Aquí también se llevaban a cabo los intercambios de dinero y se cerraban tratos.
En la actualidad el Toqi Sarrofon Bazar cuenta con varios puestos de artesanía y souvenirs.
Toqi Telpak Furushon
Este era el bazar de los sombrereros aunque hoy en él puedes encontrar casi de todo.
La estructura del Toqi Telpak Furushon es la típica de los bazares tradicionales uzbekos, con techos abovedados, cúpulas y pasillos que se comunican entre sí.
Toqi Zargaron
En su época el bazar Toqi Zargaron estaba destinado a los joyeros pero con el paso del tiempo esta especialidad se ha ido difuminando.
Situado justo a la lado de las madrazas de Addulaziz Khan y de Ulugh Beg, este bazar está repleto también de souvenirs, artesanía y artículos típicos del país.
Sin duda, un buen lugar para llevarte un recuerdo de Uzbekistán.
Mezquita Magoki Attari
Entre los bazares Toqi Sarrofon y Toqi Telpak se encuentra la Mezquita Magoki Attari.
Construida inicialmente en el siglo IX pero reconstruida más tarde en el XV se trata de la mezquita más antigua de Asia Central.
Y es que al parecer durante las obras de restauración los arqueólogos encontraron en el subsuelo de la mezquita restos de un templo zoroastra del siglo V y de otro budista aún más antiguo.
En la actualidad la Mezquita Magoki Attari acoge en su interior un pequeño museo dedicado a las alfombras de Uzbekistán.
La entrada a la mezquita cuesta 20.000 soms (1,80 € – junio 2022).
Horario: todos los días de 9 a 17 h.
Madraza de Abdulaziz Khan
Otro de los lugares que ver en Bujará es la Madraza de Abdulaziz Khan.
Construida en el año 1652 por orden de Abdul Aziz, el edificio supuso toda una novedad arquitectónica y decorativa para su época ya que en él se utilizaron por primera vez el color dorado y el mármol.
Se dice además que incluso el propio Abdul Aziz consiguió poner un retrato suyo en el mihrab de la sala de oraciones, algo que como ya sabrás va en contra de las leyes del Islam.
Sea así o no la Madraza de Abdulaziz Khan es una de las joyas de Bujará y cuando la visites te encantará.
Horario: todos los días de 9 a 17 h.
Madraza de Ulugh Beg
Justo en frente de la Madraza de Abdulaziz Khan se encuentra la Madraza de Ulugh Beg.
Construida en el año 1417 se trata de la madraza más antigua de Asia Central.
Su decoración hecha a base de azulejos azules aún nos recuerda la grandiosidad del edificio sin embargo el mal estado de conservación del mismo, sobre todo del patio interior, deja un sabor agridulce, la verdad.
Y es que el paso del tiempo ha hecho de las suyas y la madraza necesita urgentemente una restauración y un lavado de cara.
Esperemos que lo hagan pronto.
Horario: todos los días de 9 a 16:30 h.
Complejo Poi Kalon
Y llegamos al que quizás sea el lugar más emblemático de Bujará, el Complejo Poi Kalon.
Situado en el corazón de la ciudad está compuesto por el Minarete Kalon, la Mezquita Kalon y la Madraza Mir-i-Arab. Y aunque sea mucho menos popular que la maravillosa Plaza del Registán no por ello es menos bello. De hecho el Complejo Poi Kalon es de esos lugares que quedan grabados a fuego en la memoria.
Minarete Kalon
Construido en el año 1127 durante algún tiempo fue el edificio más alto de Asia Central gracias a sus 47 metros de altura. Por eso también se utilizó como faro guiando a las caravanas y mercaderes que llegaban a la ciudad a través de la Ruta de la Seda.
Su belleza ornamental era tal que hasta el mismísimo Gengis Khan cayó rendido a sus pies y no fue capaz de derribarlo, algo que no hizo por ejemplo con la antigua mezquita que descansaba a los pies del minarete.
Lleva en pie casi nueve siglos y ahí permanece impasible al paso del tiempo.
Mezquita Kalon
Levantada sobre la antigua mezquita destruida por Gengis Khan, la Mezquita Kalon es la mezquita más importante de Bujará y también una de las más grandes de Asia Central.
El edificio se construyó en el siglo XVI y tenía aforo para unas 10.000 personas.
Su patio interior está decorado con azulejos que adornan fachadas y paredes creando un efecto visual de lo más llamativo.
Para acceder a la Mezquita Kalon hay que pagar una entrada de 10.000 soms (0,90 € – junio 2022) y taparse hombros y piernas si se llevan al descubierto.
Madraza Mir-i-Arab
El tercer edificio del Complejo Poi Kalon es la Madraza Mir-i-Arab.
Data del siglo XVI y en ella se pueden ver todos los elementos arquitectónicos característicos del arte timúrida.
En la actualidad la madraza está en funcionamiento por tanto solo se puede visitar el vestíbulo, no así las habitaciones ni el patio interior.
La Madraza Mir-i-Arab es uno de los edificios más bonitos de Bujará, sobre todo al caer la noche cuando la iluminación aparece en escena.
Para tener las mejores vistas del Complejo Poi Kalon lo mejor es reservar mesa en el restaurante Chashmai-Mirob.
Situado justo en frente de la plaza Kalon este local ofrece una vista panorámica del minarete, la mezquita y la madraza, siendo un lugar estratégico para hacer fotos para el recuerdo.
Ark de Bujará
Con el nombre de Ark se conoce a la antigua fortaleza de Bujará, edificación que durante siglos fue además la residencia de los emires de la ciudad.
Bombardeada en el año 1920 por el Ejército Rojo en la actualidad ya no es ni la sombra de lo que fue.
Sin embargo, aún se conservan algunas estancias reales, hoy reconvertidas en pequeños museos, y también la Mezquita Juma. Un edificio del siglo XVII repleto de columnas de madera talladas con todo lujo de detalles.
El resto del Ark está casi en ruinas así que tampoco hay mucho más que ver.
La entrada al Ark de Bujará cuesta 25.000 soms (2,25 € – junio 2022)
Horario: todos los días de 9 a 19:30 h.
Torre de Bujará
Justo en frente del Ark se encuentra la Torre de Bujará, una antigua torre de agua reconvertida en restaurante (en la base) y mirador. Para subir a la torre hay que pagar 40.000 soms (3,60 € – junio 2022).
Al parecer desde la parte superior de la torre se tienen unas buenas vistas de la ciudad pero nosotros decidimos no subir.
Mezquita Bolo – Hauz
Al lado de la Torre de Bujará está la Mezquita Bolo – Hauz.
Data de 1718 y lo que más llama la atención de ella son sus columnas de madera talladas y policromadas.
En su momento la Mezquita Bolo – Hauz era el lugar donde los emires rezaban y donde se llevaban a cabo también las coronaciones.
Mausoleo de Ismail Samani
Terminamos nuestras recomendaciones sobre qué ver en Bujará en el Mausoleo de Ismail Samani.
Situado en la zona oeste de la ciudad, más allá del Ark y dentro del llamado Parque Samani, el Mausoleo Samani es el monumento musulmán más antiguo de la ciudad.
En su interior descansan el propio Ismail Samani, fundador de la dinastía Samánida, su padre y también su nieto.
El monumento se ha conservado en perfecto estado y hoy podemos verlo como si el tiempo no hubiera pasado por él.
El acceso al mausoleo es gratuito.
Mapa de los lugares que ver en Bujará
En este mapa te mostramos todos los lugares de interés de Bujará, también los restaurantes donde estuvimos, los mejores alojamientos para dormir en la ciudad y algunos datos útiles que te servirán para preparar tu viaje.
Cómo llegar a Bujará
Igual que sucede con Samarcanda, Bujará también tiene aeropuerto internacional y estación de trenes.
Lo más habitual es que si estás haciendo una ruta por Uzbekistán y en ella visitas las principales ciudades del país seguramente llegues a Bujará en avión o en tren.
Nosotros salimos de Samarcanda rumbo a Bujará en un tren de alta velocidad (Afrosiyob) y la verdad es que el trayecto se nos hizo cortísimo. Además los billetes de tren son muy baratos y comprarlos online es fácil y sencillo.
Qué más se puede pedir?
Dónde comer en Bujará
En Bujará existen numerosos restaurantes, bares y cafeterías así que no resulta complicado encontrar un buen lugar para comer, almorzar o cenar.
Sin embargo, en este post queremos darte algunas recomendaciones que creemos te gustarán.
Lyabi Hauz Restaurant
Situado junto al estanque de la Plaza Lyabi Hauz, este restaurante es uno de los mejores lugares para comer en Bujará.
El local es tipo chaikhana (taberna uzbeka) y por tanto en él el menú es a base de platos típicos del país (plov, manty, etc).
Repleto de mesas de madera con vistas directas al estanque el Lyabi Hauz Restaurant es además un buen lugar para tomar algo o simplemente descansar.
En cuanto a los precios son muy económicos y la calidad muy buena también.
Nosotros pedimos dos platos de carne al estilo kazán, dos bebidas, pan y postre y pagamos tan solo 160.000 soms (14 € – junio 2022).
Eco Terrace
Justo al lado de las Madrazas de AbdulAziz y Ulugh Beg se encuentra otro de los mejores restaurantes para comer en Bujará. Su nombre es Eco Terrace y estamos seguros que te encantará.
Para empezar el restaurante cuenta con una enorme terraza exterior ideal para el buen tiempo (nosotros estuvimos dos veces en ella, una cenando y la otra tomando algo por la tarde y nos encantó).
Y por otro la carta es variada, no solo cuenta con platos típicos de la gastronomía uzbeka sin también con pizzas y ensaladas.
La relación calidad – precio ideal también. Eso sí ten en cuenta que no se puede pagar con tarjeta de crédito, solo admiten cash (efectivo).
Old Bukhara
Este restaurante de Bujará tiene todo lo necesario para convertirse en tu local preferido de la ciudad.
La razón es que aquí se come de lujo y además la terraza superior es una delicia.
Nosotros subimos una noche a tomar un helado y nos encantaron tanto el local, como el trato al cliente y los precios claro. Quizás es un poco más caro que los dos restaurantes anteriores pero nada excesivo.
El Old Bukhara está situado justo detrás de la Plaza Lyabi Hauz.
Bella Italia
Si estás un poquito hart@ de la comida uzbeka entonces tienes que ir a Bella Italia.
Situado en el límite del casco antiguo y la parte nueva de la ciudad este restaurante es la combinación perfecta de local bonito y buena carta.
Y es que aquí las pizzas están de muerte y la pasta la preparan muy bien.
Nosotros pedimos una pizza cuatro quesos grande y un plato de pasta con postre y bebidas y pagamos 110.000 soms (9,90 € – junio 2022)
El restaurante Bella Italia nos encantó y nos parece una estupenda opción para comer en Bujará sobre todo si llevas ya muchos días de viaje por Uzbekistán y necesitas cambiar un poco de aires gastronómicos jajaja.
Chashmai-Mirob
Terminamos nuestras recomendaciones para comer en Bujará en el restaurante Chashmai-Mirob.
Situado justo en frente del Complejo Poi – Kalon lo mejor de este local tipo chaikhana sin duda es la excelente panorámica que ofrece del Minarete Kalon, la mezquita y la Madraza Mir-i-Arab.
En cuanto al menú como imaginarás está formado por platos típicos uzbekos y algunos rusos. Aún así tenemos que decir que no es el mejor restaurante de Bujará en cuanto a calidad se refiere pero bueno, tiene un pase.
Además ya solo con las vistas que se tienen desde su terraza merece la pena subir aunque solo sea a tomar algo.
Dónde dormir en Bujará
Para dormir en Bujará recomendamos buscar alojamiento en la Plaza Lyabi House o en los alrededores de la misma.
Nosotros reservamos dos noches en el Hotel Malika, un hotel boutique situado justo al lado de la plaza, y sin duda fue el mejor hotel de nuestra ruta por Uzbekistán.
Además la relación calidad precio es excelente (habitación doble + desayuno: 40 € / noche – junio 2022) así que apunta este nombre en tu libreta.
Otras opciones de alojamiento en Bujará pueden ser el Bukhara Baraka Hotel, situado en un extremo de la Plaza Lyabi Hauz. O el Sarrafon B&B, una estupenda casa de huéspedes ubicada justo detrás de la Plaza Lyabi Hauz y al lado del Toqi Sarrofon Bazar.
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